SOSA CAUSTICA COMO DESATASCADOR, ¿ES RECOMENDABLE?
Mucha gente recomienda el uso de ácido sulfúrico o sosa cáustica para desatascar los desagües. Si bien estos productos químicos pueden ser muy efectivos para desalojar o incluso destruir los tapones, son extremadamente peligrosos para las personas y las tuberías.
Sosa cáustica y ácido sulfúrico
La sosa cáustica es un producto particularmente corrosivo y, aunque a menudo se recomienda para desbloquear inodoros o lavabos, debe evitarse por completo. Si entra en contacto con los ojos, la sosa cáustica puede provocar daños irreversibles en los ojos y, en consecuencia, graves problemas de visión.
En las tuberías, este químico puede dañar el PVC, el fibrocemento y otros componentes y causar costos de reparación significativos. Si tus tuberías son frágiles, ten en cuenta que los riesgos de fuga y daños irreversibles son especialmente altos.
La sosa caustica es un corrosivo que deshace todo tipo de materiales con gran facilidad, tanto orgánicos como inorgánicos. La ventaja de la sosa caustica es a la vez su mayor problema.
Es tal la potencia de este compuesto, que puede llegar a destruir las propias tuberías que estamos intentando liberar. Si entra en contacto con el aluminio, éste acaba por romperse si lo sometemos de forma muy continua a los efectos de la sosa caustica.
Utilizado en exceso que puede convertirse en atascador, puede llegar a cristalizar dentro de nuestras tuberías, agravando tremendamente la situación.
Como la sosa cáustica, el ácido sulfúrico es particularmente peligroso debido a ser altamente corrosivo. Este producto es potencialmente mortal y puede causar daños irreversibles en la piel o los ojos. Si has inhalado ácido sulfúrico accidentalmente, puedes experimentar irritación grave en la nariz, boca y problemas pulmonares de diversa gravedad.
En cuanto a su eficacia, cabe señalar que el ácido sulfúrico es capaz de eliminar rápidamente las obstrucciones. Sin embargo, representa un gran peligro para sus tuberías, ya que ataca a diversos materiales como el PVC.
El ácido clorhídrico
Si bien el ácido clorhídrico pudiera sonar como una excelente alternativa a la sosa cáustica y el ácido sulfúrico, no lo es. Al igual que estos dos productos químicos, el ácido clorhídrico es un potente decapante y es extremadamente peligroso.
Aparte de los daños en las tuberías, el uso de este producto para desatascar las tuberías puede provocar un incendio. Esto se debe a que se puede haber formado sulfuro de hidrógeno en su tubería debido a la presencia de ácido clorhídrico. Este gas es inflamable e incluso explosivo, por lo que todo lo que se necesita es una fuente de calor o pequeñas chispas para iniciar un incendio o explosión en las tuberías y en tu casa.
Si has usado ácido clorhídrico para desatascar y las tuberías huelen mucho a huevos podridos, es mejor evacuar el área y llamar al departamento de bomberos.
Además del riesgo de explosión e incendio, este ácido puede causar intoxicaciones graves si se ingiere, como la sosa cáustica y el ácido sulfúrico.
Además, su uso como desatascador tiene un impacto significativo en el medio ambiente. El agua que contiene ácido clorhídrico es muy difícil de tratar y representa un gran peligro para la flora y fauna acuáticas.
Utiliza herramientas inadecuadas
El uso de herramientas puede ser una excelente manera de eliminar las obstrucciones que se han formado en las tuberías, sin recurrir a productos químicos peligrosos. Sin embargo, ten en cuenta que se recomienda encarecidamente no optar por objetos no diseñados para desatascar, como cables o palos.
Aunque estos desatascadores improvisados son más o menos efectivos para eliminar grandes obstrucciones, pueden causar graves daños a las tuberías y, por tanto, importantes trabajos de reparación.
Para desatascar rápidamente las tuberías, evitando al mismo tiempo los daños causados por productos químicos o herramientas inadecuadas, es recomendable acudir a un profesional especializado en saneamiento.
Para eliminar las obstrucciones, el experto primero realizará un diagnóstico con el fin de evaluar el estado de las tuberías y determinar el origen del problema. Una vez finalizado el análisis, seleccionará las herramientas más adecuadas para desatascarlas.